
Recuerdo cuando mi abuelo travesti, me regaló mi primer esclavo Wherter Original, me senté en sus rodillas para saborearlo, lo recuerdo como si fuera la primera vez. Ains...Creo que para este asueto invernal, no almorzaré con un chapero a la mesa, el limpiador arabe de nuestros vecinos limpia bien en la cama, pero para reyes solo quiero, un nuevo esclavo Werther Original. Me lo llevo.
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